Nine Men’s Morris — El clásico reto de estrategia que nunca pasa de moda
Pon a prueba tu mente con este antiguo juego de ingenio donde cada movimiento cuenta.
Forma molinos, bloquea a tu oponente y demuestra tu habilidad para pensar varios pasos adelante.
Nine Men’s Morris es ideal para compartir en familia, desarrollar la concentración y disfrutar partidas llenas de emoción y estrategia.
Arma, piensa y gana… ¡descubre por qué este juego ha conquistado generaciones!
Precio: $15.000 + envío
1. Significado literal del nombre
Nine → nueve
Men’s → de los hombres (fichas o piezas)
Morris → aquí no tiene nada que ver con el apellido “Morris”.
Proviene del inglés medieval “merels” o “merrills”, una palabra antigua para “fichas” o “piezas de juego”.
Así que Nine Men’s Morris significa literalmente:
“El juego de los nueve hombres (o fichas)”.
2. Origen del nombre
En el inglés antiguo, el juego era conocido como “Merels” o “The Mill Game”, porque al formar una línea de tres fichas se decía que se hacía un “mill” (molino).
Con el paso del tiempo, el término “Merels” se transformó en “Morris” por la pronunciación popular.
De hecho, versiones más antiguas del nombre incluyen:
“Nine Men’s Merels”
“Ninepenny Marl”
“The Mill Game”
3. Contexto histórico
El juego es muy antiguo, con más de 3.000 años de historia. Se han encontrado tableros grabados en templos egipcios, ruinas romanas y castillos medievales.
En la Edad Media era tan popular en Inglaterra que incluso Shakespeare lo menciona en Sueño de una noche de verano (“The nine men’s morris is filled up with mud”).
1 tablero
18 fichas (9 de un color y 9 de otro)
Dejar al contrincante con solo 2 fichas o sin movimientos posibles.
¡El último jugador que pueda mover sus fichas gana!
El juego tiene dos fases:
Fase de colocación (también llamada fase de goteo).
Fase de movimiento (también llamada fase de deslizamiento).
Cada jugador elige el color de sus fichas.
Por turnos, colocan una ficha a la vez sobre las intersecciones del tablero (los puntos donde se cruzan las líneas).
El objetivo es formar un molino, es decir, tres fichas del mismo color en línea recta.
También puedes colocar tus fichas para evitar que el otro jugador forme su molino.
Si formas un molino:
Puedes retirar una ficha del contrincante.
Esa ficha se saca inmediatamente y ya no puede volver al juego.
Si no te das cuenta de que hiciste un molino y el turno pasa, ya no podrás sacar ficha después.
Cuando todas las fichas están colocadas, comienza la fase de movimiento.
En su turno, cada jugador mueve una ficha a un punto adyacente vacío (unido por una línea).
No se puede saltar sobre otras fichas.
El objetivo sigue siendo formar molinos para sacar fichas del oponente.
Puedes mover fichas que estaban en un molino, pero si las devuelves enseguida al mismo lugar y formas de nuevo el mismo molino, ya no cuenta para sacar una ficha del rival.
Gana quien logre que su contrincante se quede con solo dos fichas o no pueda mover ninguna.
¡Y listo!
Usa tu estrategia, observa bien el tablero y disfruta este clásico juego de ingenio.
¡Diviértete formando molinos y ganando con tus mejores jugadas!